Entradas más populares de la semana

Buscar

La magia del temporal

La magia del temporal

Por el 8 de abril de 2015 en Apuntes con 2 Comentarios

La magia del temporal me trae una noche diferente, una noche marcada por las sombras, entre las cuales sigilosa se escurre la musa, intentando alcanzarme.

No tengo ni idea que querrá decirme ni tampoco que desea que yo le diga, pero sé que aprovechándose de la soledad que me rodea baila a mi alrededor con torpes pasos; la noto a mi lado, se me aproxima tímidamente, sin apenas dejarse oír, pero a pesar de su discreción siento como revolotea a mi alrededor, decidida a hacerme compañía por un rato.

El viento sopla con fuerza, con mucha fuerza. Me gusta abrir la ventana y sentirlo en mi cara.

De niña, uno de mis momentos favoritos era abrir los brazos y dejarme arrastrar por él, imaginar que me ayudaría a volar alto, a volar libre…enredada entre las nubes blancas que se balanceaban atrevidas en la azotea de mi abuela.

Hoy, aunque todo es distinto también me envuelve su magia, y siento como el sonido ensordecedor del temporal, mezclado con el rugir lejano que llega del mar conforman una noche especial y mágica.

Los árboles en su mayoría aún desiertos de hojas son seres desvalidos a la merced del vendaval, y yo mientras tanto, disfruto observando la soledad de la calle, y el abandono en el que parecen encontrarse los únicos testigos mudos y valientes capaces de enfrentarse al viento que sopla, las farolas.

Mañana el temporal habrá pasado, porque todos los temporales pasan; entonces, el cielo volverá a recobrar su color perdido, el sol volverá a lucir con fuerza, los árboles esperarán pacientes la presencia de esa primavera que no acaba de llegar, la única capaz de vestirlos de verdes. Y así,  solamente las farolas, las tristes farolas seguirán ahí, impasibles, sin importarles demasiado la luz de la mañana.

Mientras tanto, a mí me habrá quedado la magia del temporal.

 

2 Comentarios

Trackback URL | Comentarios Feed RSS

  1. Mamen Piriz García dice:

    Un buen relato Pilar. Un abrazo

Publica un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Subir