
Escribir
Escribir aligera el alma de suspiros cargados de tristeza, da consuelo al corazón que llora en silencio y a veces es un grito en la garganta que no quiere quejarse, porque no desea que se oiga su voz.
Escribir es compañía para la soledad, música para quien lo lee y sentimientos dibujados con signos que se enlazan, para así poder expresar las miles de ideas que adormecidas en nuestro interior, esperan poder asomarse a la gran ventana de la creatividad.
Sin duda, escribir es esencialmente comunicar, conseguir transmitir sensaciones plasmadas en un papel, en este caso en la pantalla del ordenador.
Se escribe para compartir, para ser leído e incluso para ser recordado; pero sobre todo escribimos para nosotros mismos.
A veces, no nos habremos expresado lo bastante bien, nuestros renglones pueden estar un poco torcidos, pero son nuestros, un trocito pequeño de lo que somos ó quizá… de lo que quisiéramos llegar a ser.