
El calor o la caló
Soy el calor o la caló y cada verano se habla de mí, los expertos echan mano a las estadísticas y los ciudadanos a sus recuerdos y todos coinciden que este año mi presencia es y será más notoria que el anterior.
Tengo que reconocer que por estas tierras del sur este verano me estoy pasando un poco, mañanas tórridas y noches calurosas,la verdad, es que los estoy tratando sin piedad.
La caló, así es como pronuncian mi nombre por el sur de España, y no es porque no sepan pronunciar mi R final, como he leído en algún sitio, si no que al hablar les gusta economizar letras y tiempo.
Colores amarillos brillantes, cielos azules y ambiente cargado, horas de sol eternas, días de luz y luna llena, así es la estación a la que pertenezco, el estío, ese que me permite envolverlo todo, creando un aire denso y difícil de respirar y que algunos cuerpos soportan como una pesada losa que les impidiera moverse con facilidad.
Sí, soy la calor, esa que empuja a la gente a las playas, que los arrastra a la búsqueda incesante del agua fresca y de la cerveza bien fría, lo cierto es que siento decepcionaros pero en el sur difícilmente podréis libraros de mí.
De hecho, aquí sigo, pisando fuerte y sin que me tiemble el pulso, llevo semanas causando que los animales busquen ansiosos trozos de sombras donde dormir, que las plantas esperen impacientes ser liberadas de la canícula que las asfixia, y que los insectos trabajadores y callados, aprovechen este tiempo para recolectar el alimento que escaseará cuando yo me aleje.
Seco la tierra, amarilleo todo lo verde que toco, derrito cualquier cosa que se pueda derretir, y a vosotros os convierto en seres abatidos y sin vitalidad ante mi presencia, que esperáis impacientes entre silencio y penumbra verme pasar.
Que duda cabe que soy la protagonista, no hay ni habrá nuca verano sin mí, porque soy inherente a esta tierra, formo parte de sus mañanas sofocantes, de su siesta reponedora y de los muchos atardeceres que os transportan a bellas puestas de sol y a esas noches interminables, en las que tratáis de vivir antes de que el amanecer os devuelva a vuestras vidas diarias, con una nueva mañana donde el bochorno no os dejará ni tan siquiera pensar con claridad.
Así es la calo…. y mi tierra. pasara y llegara el otoño…. Añoraremos las horas de luz… Besos Pilar!!
Gracias por leer y comentar. Un besote.
Pues la caló es mala para algunas cosas sobre todo para trabajar de sol a sol, sofocos es lo que nos da la caló. Pero es tan necesario que haga un poco de calor por el norte. Este verano hemos tenido caló 4 días , el resto solo ha hecho calor. Buen verano que ya se acaba , solo falta unos dias. Un abrazo
Mil gracias por pasar por aquí. Y sí, unos mucho y otros tampoco jejeje!!
Ha hecho caló hasta por el norte, así que por el sur… Besos, Pilar, y un abanico viene bien para cuando no hay aire acondicionado o ventilador a mano, jeje.
Pues sí, cualquier cosa vale para darnos algo de fresco. Gracias por pasar por aquí. Besote.