
Colgar el sambenito, origen
Colgar el sambenito es una expresión cuyo origen se encuentra en un atuendo utilizado en la Edad Media por los católicos, proviniendo de las palabras saco bendito, que degeneró por similitud hasta convertirse en sambenito; un atuendo impuesto por la Inquisición como penitencia a los condenados.
Tenía forma de escapulario o poncho, era amarillo con cruces rojas en forma de aspas por considerar que el reo no merecía llevar la cruz de Cristo; se llevaba junto con un gorro de papel o de cartón en forma de cono, llamado coroza.
La indumentaria cambiaba según la falta cometida y la condena impuesta, dos cruces boca abajo para el arrepentido, (también llamados reconciliados), negro y llamas boca arriba para los no arrepentidos y que serían quemados vivos en la hoguera.
A veces la pena y el escarnio no terminaban con la muerte, colgándose un cártel en las iglesias recordando el hecho, para que así sirviera de escarmiento.